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lunes, 9 de mayo de 2016

El kit romántico ♥

 “Recuerda que tú existes tan sólo en este libro,
agradece tu vida a mis fantasmas...
Luis García Montero

Historias que nos transportan a los sueños más profundos, que nos hacen imaginarnos en otros mundos, rodeados de otra gente, sintiendo aquello que, tal vez, desearíamos. Los libros nos hacen proyectar todos nuestros “yos”, nuestros personajes salen de sus cajas.

Berta intentó tirar adelante con una cadena de libros. No funcionó. La gente es reacia a regalar a desconocidos. No siente curiosidad por sorprender. No le debe aportar la adrenalina que nos produce a otros tantos. Así que visto lo visto, decidí hacer dos envíos. Un kit romántico para cada una. Berta y Soraya.
Luchadoras, locas, pensantes, sensibles, soñadoras, apasionadas. Me transmiten tantas cosas estas dos mujeres que pactamos hacer nuestra cadena. Porque sí. Porque si los demás no quieren, nosotras valemos oro, ¡qué digo oro! Más que oro.
Sabía que quería libros especiales para ellas. No tuve duda: Alice Munro y Jhumpa Lahiri. Imprescindibles. Libros para poner la piel de gallina. Para leer con el rollo de cocina a tu vera. Indicados solo para corazones sensibles pero resistentes. Perfectos para ellas. Relatos breves, de los que a mí me gustan. Para saborear cada pocas páginas. Parar, pensar, recapacitar, absorber y volver a empezar.
Junto a la lectura iba un trocito de historia. Una puntada de pasado en blanco y negro. Recordé una librería, El Genet Blau, dónde hace un tiempo encontré unas postales de los años 20. En blanco negro y semi-coloreadas, como antaño hacían. Escritas, enviadas y recibidas. Vendidas después e imposible pensar por cuántas manos habrán pasado. Pensé que sería ideal añadir a su libro un trocito de historia vivido por otra mujer. Una felicitación, una frase de perdón, una fecha especial, un recuerdo para no borrar… En muchas ocasiones solían ser fotos propias. De esas que se hacían en fotógrafos profesionales y luego se enviaban a los familiares en fechas señaladas.

De pequeña me entusiasmaba revisar la caja de postales de mi madre. Aún hoy en día la remiro de vez en cuando. Había fotos como estas. Alguna de ellas con alguna de mis tías. Foto familiar que había viajado por España con una felicitación hacía mi madre. Es curioso como en la mayoría de aquellas postales; igual que en estas que he comprado para Berta, Soraya y para mí, se felicitaban el día del santo. Como si fuera lo más normal. Enviar una postal el día de la onomástica. Curiosidades. Retales de historias de la mano del cartero.

Un lazo de lana, tejido a tricotín en rosa y verde, ataba el kit romántico. Madrid y Pamplona, mis primeras paradas lectoras. Tengo más románticas en mente, así que me parece que no serán los únicos envíos. Atención a sus buzones...

2 comentarios:

  1. Que bonica que ets!
    La veritat és que és molt trist que no hagi funcionat!
    L'Arbre dels Llibres de la peque va quedar nomes amb un llibre que em va enviar una amiga perque la filleta li feia pena!

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    1. Tu si que ets bonica que sense els teus comentaris això no té llum ni color ni res!!!! muà! jo ja en tinc un en ment per la filleta, per a tu i per a mi! l'he de comprar!!!!!

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